Un velón al lado izquierdo y un juego de guitarras en el derecho decoraban el escenario, y Ely Guerra en una silla hizo su primera descarga musical a capella, canción que fue entonada a todo pulmón y remeció el templo del rock.Después, guitarra en manos interpretó varios de sus conocidos temas: “Silencio”, “Quiero verte”, “Peligro” y “Lágrimas de agua salada”, entre otros.
Una noche de euforia, éxtasis y una alta dosis de buen rock es lo que se vivió en el resto de la jornada. Los presentes en el Hard Rock Café pudieron apreciar las dotes camaleónicas de Guerra llevando a los oídos sus acordes melosos, románticos, energéticos y eléctricos.
También es sabido que Ely Guerra en sus actuaciones despliega una catarsis de fuertes emociones.
Desde su presencia sobre el entarimado y la madurez que ha ganado con el paso de los años y su desenvolvimiento vocal y musical, son sus armas más preciadas e importantes.“Tengo frío”, “Bésame”, “Ojos claros labios rosas”, “Yo no”, “De la calle”, “Ángel de fuego”, fueron algunos de los éxitos musicales que acompañaron la presentación, y de los que los asistentes se hicieron eco entonando los temas.
“¡Me podrías dejar cantar, mejor por qué no se callan todas las personas que están ahí!”, vociferó la cantante a una parte del público, el reclamo se produjo porque interrumpían sus interpretaciones, incluso, más adelante en su presentación exigió que los parroquianos se mantuvieran callados.
El concierto finalizó cerca de la medianoche, en el transcurrir de la velada sólo hubo un corte musical, la última canción, el resto de la jornada se vivió de un éxito tras otro, en los que Guerra se dio el gusto de exigir silencio y entonar a todo pulmón sus temas en Hard Rock Café.
