
Guerra dio una clara muestra de su talento y habilidad con la guitarra despertando así la curiosidad de quienes paseaban con su familia por la plaza.
La llamada "Diosa del rock" dejó fluir sus inquietudes musicales a través de temas como "Te amo, I love you, Puerto Vallarta, Yo no, Silencio, De la calle, No quiero hablar, Pa-ra-ti, Más bonita, Tengo frío y Peligro".
Vestida con un pantalón de mezclilla y una camiseta blanca, Guerra cumplió su cometido en este escenario, del que destacó sus cualidades que lo han hecho uno de los lugares predilectos para pasar una tranquila tarde de fin semana.
Entre canción y canción, la roquera aprovechó para presentar a sus músicos y dar las gracias a sus admiradores, quienes la vieron estremecerse con cada una de sus interpretaciones en medio de un escenario que no necesitó más que la voz de Guerra.
Por más de hora y media, la intérprete hizo lo propio y dejó sentir la potencia de su voz con "Angel de amor, Vete, Ojos claros, labios rosas y La tumba falsa", ésta última extraída de su participación en el homenaje musical a los Tigres del Norte.
Cuando Guerra pretendía dejar el escenario, la gente no se lo permitió sin antes interpretar "Mi playa y Quiéreme mucho", por lo que no podía retirarse sin complacerlos y agradecer al público su presencia.